Te pasas años leyendo páginas sobre videojuegos en internet y siempre te preguntas como será aquel redactor que es tan "sonyero" o aquel otro que tan solo publica noticias frikis. Poco a poco vas ampliando tus webs o tus blogs para contrastar la información e intentar buscar aquellos que más se afinen a tus gustos personales.
Yo prefiero buscar la información más imparcial, pero no todo el mundo busca lo mismo, no olvidemos que hay gente que se compra la "Nintendo Acción". Que no digo que esté mal, pero que claramente buscan cosas que barren para casa.
De vez en cuando cae en tus manos alguna noticia en alguna de estas páginas o blogs y te preguntas.. "¿Y este tío como pone esto así!? No se da cuenta de que está claramente decantándose por una de las 3 compañías? Madre mía cuanto le habrán pagado. :D".
Y cuando has tenido claramente ese pensamiento durante varios días, ya lo ves claro. Ya sabes cuál es su bando, y si este bando no se adapta al tuyo, entonces lo ves como un capullo, jeje, y te lo imaginas de mil maneras posibles intentando hacer la noticia lo más ofensiva posible sin que se note su malicia.
Además, siempre están los comentarios que deja la gente para apoyar tu versión. La pega es que de los comentarios no te puedes fiar mucho porque ya se ve que la gran mayoría están hechos por chavales de 12 años. Aun así, te puede la ola contra el redactor y sigues en tus trece.
Pero entonces llega un día de lo más inesperado, y sin comerlo ni beberlo y por coincidencias del destino, conoces a ese redactor. Coño! Pero si parece un tío de puta madre, y además jamás pensé que viviera en la misma provincia que yo! Y ni por asomo hubiera imaginado que era físicamente como es!!
Y es en ese momento cuando tus perspectivas cambian, y descubres que no todo es como tú te habías pensado. Que hay un motivo para que ese redactor pongas las cosas así y no de otra manera. Y te das cuenta que has magnificado tonterías y que no era para tanto.. Te sientes imbécil. :S
Es curioso como la vida te da sorpresas cuando menos te lo esperas. Y algunas de ellas, son dignas de agradecer.
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