martes, 9 de marzo de 2010

Looser Trip - Día 6 - Toll Violation

WTF!? Que es esa música? Es una nana?
- Pero Dani tio!!

Son las 9:30 de la mañana y "Duermete niño, duermete ya" sonaba a toda castaña en el portatil de Dani.
Ayer me acosté a las 5 y pico de la mañana, pero el deber es el deber, y si queremos llegar a San Francisco hoy, he de hacer de tripas corazón y apechugar con que Dani es un moñas y he de ser yo el que lleve el coche.

Una ducha revitalizadora me devuelve a la realidad mientras Dani acaba de escribir el post. Nos aseguramos de que no nos dejamos nada, y con lagrimas en los ojos abandonamos nuestra habitación. El sueño de Las Vegas ha terminado. :(

Damos un ultimo vistazo al casino mientras canjeamos las fichas que conservé en el poker, y hacemos check out. La amable recepcionista me dice que como ya pagamos la habitación al llegar, que ya nos podemos ir. Cojonudo, internet que nos costaba 12$, al final nos salió gratis. : D

No podiamos irnos de las vegas sin haber visitado el mitico poste que anuncia que has llegado a la ciudad del pecado. Y nosotros como somos unos verdaderos Loosers, visitamos la señal de "Welcome to Las Vegas" justo cuando nos vamos, y no al llegar. : )

Entre que me desperté, nos duchamos, acabamos el post, preparamos la maletas, hicimos el check out y visitamos la señal, ya se nos hizo la 1. Así que dicidimos comer ya en una cadena llamada Jack in the Box. Otro día más que comemos hamburguesas. Ya estamos totalmente integrados. Para cuando volvamos nos harán pagar 2 billetes de avión a cada uno. xD


Compramos una botella de agua, unas patatuelas para el viaje y los mejores donuts que hemos probado nunca hasta hora. Además, visto que me siento como si me hubieran pegado una paliza yq ue me esperan 10 horas de viaje en coche, compramos también un redbull de, atención 1L. xD
Esta gente está años luz por encima de nosotros.

Ponemos gasolina y en la cola para pagar un tipo con pintas de cowboy pide un paquete de cigarrillos. El dependiente le pregunta, con la exrtema amabilidad que caracteriza el servicio en estas tierras, si tiene la edad para comprar cigarrillos. El hombre se lo queda mirando y le dice:
- Of course man.
- How old are you sir?
- 44.
- Can I see your ID please?
- Are yuou kiding me!?
- No sir, those are the rules.
- Oh my god. Fuck you man.

Y el hombre con un nivel de indignación contundente.
Como es posible que le pidas a un hombre de 44 años con pinta de haber matado osos en Siberia con sus propias manos, que te deje su carnet para ver si tiene más de 21!? xD

Una vez tenemos el coche repleto de "Gas" ya estamos listos para que empieze nuestra odisea.
Let's go to San Francisco.

10 horas son muchas horas, sobre todo si al salir de las vegas encontramos una caravana de más de 15 kilometros. OMG, si una caravana en España es una mierda, con un coche automático es aun peor, porque siempre has de tener el pie pisando el freno mientras estas parado, porque sino el coche se mueve solo aunque no pises el acelerador. Empezamos bien. :S


Para entretenernos empezamos a hablar de bandas sonoras y compositores. Pensamos en la canción de piratas del caribe, pero no nos sale. Mierda. Nos pasamos todo el viaje de vuelta intendo recordarla en diferentes momentos, pero no hubo manera. Que rabia da cuando intentas acordarte de algo que tienes en el putna de la lengua pero no sale. Fué lo primero que hicimos al llegar al hotel. : P

En este camino de vuelta pasamos por una carretera diferente a la de la ida. Esta si que era realmente loq ue yo esperaba. una carretera de un solo carril y en las dos direcciones, con un asfalto de mierda, y con el basto desierto a cada lado. Esto si que es atravesar el desierto de mojave como dios manda.

El clima esta un poco loco. A veces nos llueve torrencialmente y otras sale un sol de cagarse, pero claro, hay que pensar que este viaje es casi como cruzar España entera en coche, así que si lo pensamos friamente,
encontrarnos diferentes climas vendría a ser lo normal.

Hemos de pillar la carretera del condado numero 99, para enlazar con la interestatal 5, pero la mala señalización nos hace perdernos. Fuck.

Es totalmente de noche y estamos perdidos, sin un mapa de la zona y sin GPS. Hell yeah.

Tras guiarnos solamente por mi intuición llegamos a un pueblo de la América profunda, donde paramos en un super a pedir indicaciones. Hemos tenido suerte, y un par de tipos con unas pintas muy raras nos indican como llegar a la autopista. Un latino con un coche tuneado y la música a todo trapo baja y entra al local. Este sitio es bastante chungo, cuanto antes nos piremos mejor. Pillamos unos sandwitches de pollo y otro Redbull de litro y retomamos el viaje.


Esto del Redbull de litro no puede ser bueno. xD No es Redbull propiamente dicho, sino de la marca Monster. Una lata con forma de pila y de tamaño jumbo. El texto en la lata reza: "We know that bigger is better.. Because you can never get too much of a good thing". Di que sí jaja.

Sin haber comido ni dormido casi nada nos metemos entre pecho y espalda medio litro más de Redbull. Vamos como motos. Mi pierna tiembla sola. Con lo bien que me sienta a mi la cafeína y esto es una bomba para mis nervios :S Pero si no quiero dormirme en medio del camino es lo único que podemos hacer.

Los sandwitches de pollo son lo mas asqueroso que hemos comido hasta ahora. Como es posible que estén tan malos!? Miramos la caducidad pero no están pasados. Lastima. Habrá que comérselos, que remedio, es lo que hay.

Por fin llegamos a San Francisco cuando de golpe ante nuestros ojos aparece un peaje. Osti! Pero si a la ida no había! :S
Bueno, pues pagamos y ya esta. Buscamos el único carril que no pone "FasTrack" que no tenemos ni idea de lo que es.
- "Son 4 dolares por favor".
- "Tenga la tarjeta señorita"
- "No, no. Aquí solo cash".
- "Mmmmm. No tenemos cash. :S"
- "Pues tomad majetes este papelito amarillo y continuad."

- Que raro no?
- A ver que pone.. "Toll Violation"? 25$!?
- OMG!!

Sí señores. Toma ya. Una pedazo multa a lo americano. xD
Ahora somos unos forajidos perseguidos por la ley en territorio extranjero. Aun no la hemos pagado. A ver que sucede mañana cuando entreguemos el coche en la casa de alquiler. No les hará mucha gracia supongo. : )


Cuando alquilamos el coche nos dijeron que aprovechásemos la gasolina al máximo, y que al entregarlo lo devolviéramos con el deposito casi vacío. Cojonudo, cuando llegas a la entrada de San Francisco y se enciende el piloto de la gasolina piensas: "Ole, que cracks somos."
Lo que no esperas es que el hotel esté mas lejos de lo esperado y una vez llegamos a él no encontrar un sitio donde aparcar. Nos pasamos un cuarto de hora buscando un parquímetro donde poder dejarlo rezando que no se nos quedase tirado en medio de la calle por falta de gasolina o que al pillarlo mañana no fuésemos capaces de llegar al local de alquiler. :S A ver que sucede mañana.

Los parquímetros aquí son una locura. Cada lado de cada calle tiene sus propias normas de aparcamiento. "Solo de 4 a 6 de lunes a miércoles."  "Solo de 8 a 14 y de 17 a 22, los lunes, miércoles y viernes" etc.. Tienes que mirartelos uno por uno!! :S

Una vez aparcamos, llegamos reventadísimos al hotel. Me siento como si me hubieran pegado una paliza. Pero el saber que en breve pillaré una cama me permite seguir en pie. Por fin podré dormir 12 horas como me merezco tras no haber dormido nada esta noche y habernos pegado un viaje de 1000km.

El hotel es infinitamente mejor que donde estuvimos la primera vez. Aun así, el lavabo y la ducha también son compartidos. Los pasillos son como los del hotel de "El Resplandor", da un poco de yuyu, con las puertas rojas, todo con moqueta (como les gusta a esta gente las moquetas por dios!!). Además, la zona es muy buena, muy tranquila, transitada y tan solo a una calle del Transamerican Pyramid.

- "Donde habéis aparcado chicos?"
- "Al final hemos tenido suerte y esta a un par de calles."
- "Recordad que a las 7 empiezan a contar los parkimetros, eh."

Mis ojos empiezan a llenarse de lagrimas y me hundo de golpe en la miseria. Eso quiere decir que dormiré si llega a tan solo 5 horas, para a las 6:30 despertarnos, ir a por el coche y llevarlo a primera hora a la casa de alquiler.
Por dios, es que no voy a poder descansar nunca!? :'(

En cuanto nos tumbamos en la cama caemos fritos. El viaje a sido agotador, pero ha sido una experiencia COJONUDA.

lunes, 8 de marzo de 2010

Looser Trip - Día 5 - Resacón en Las Vegas


Cantan los ZZ Top que Vivan Las Vegas y cuanta razón tienen. Si existe un lugar de perdición, de vicio, de juego intenso, de mujeres de moral desinhibida, de esperpentos a cada esquina… ese lugar es Las Vegas. Y claro, mola un montón.

Son las 10 de la mañana y nos despedimos de nuestro querido Royal Pagoda Hotel. Ha sido una noche intensa en la que Rafa, que resulta que habla por las noches cuando está viviendo un sueño muy profundo, se ha llegado a despertar gritando Dios! Dios! Dios!… con el consecuente ataque cardíaco que me ha producido.

Una vez superado el impacto y recuperado el lugar original de mi corazón hemos llegado a la conclusión de que sólo era una pesadilla. Una pesadilla muy chunga por lo que se ve. 

Empieza a llover a cántaros y los truenos y relámpagos hacen acto de presencia. Nos cagamos vivos, se supóne que la carretera está en medio del desierto y claro, no apetece mucho conducir en medio de un desierto infernal durante una tormenta eléctrica. Sólo faltaría que cayese un rayo en el coche y friera el motor. Por suerte el Dios Americano al que todos rezan por aquí se apiada de nosotros y la lluvia cesa. Thanks God, in America we trust.

Cogemos el coche para "manejar" como dicen por aquí. El destino está claro, la excitante, salvaje, bestial… Las Vegas. Sólo será una noche en la que Rafa planea desbancar a la banca de algún casino, vivir intensamente la experiencia y, si puede, cometer algún crimen por aquello de conocer a los CSI. Le convenzo de que no, que lo del crimen no está bien visto y que mejor que centre sus esfuerzos en jugar al Poker. Está de acuerdo.

El viaje, de unas 4 o 5 horas es bastante interesante. Tomamos la interestatal 15 dirección a Las Vegas / Barstow que, se supone, nos dejará justo en la calle de nuestro Hotel, el Hooters Casino Hotel. 

La carretera es infernalmente recta, aunque quizá no tanto como la que nos llevó a Los Ángeles. La vegetación va cambiando progresivamente, el verde se va perdiendo y se empieza a dibujar el desierto. Es increíble, el mismo desierto en el que Grissom y sus colegas del CSI han encontrado tantos cadáveres, el típico desierto de las Road Movies… el desierto de Nevada.

A nuestro alrededor la nada más absoluta. Sólo una carretera en linea recta y camiones que la comparten con nosotros. Esperábamos que estuviera mucho más destrozada de lo que está, qué daño hacen las pelis.


A las 12:30 decidimos hacer un brunch por que ya nos sentimos plenamente integrados con la cultura Americana. Paramos en un Denny's y elegimos el típico plato de huevos revueltos, bacon, salchichas y patatas. Estos tíos sí que saben empezar el día con energía y no con unas galletitas y un vaso de leche. Eso son moñadas Españolas, aquí las cosas se hacen a lo grande.

Con el estómago lleno y una carretera infernal por delante proseguimos nuestro camino. Un camino lleno de peligros.

Al poco rato nos adelanta un Monster Truck. Una especie de camioneta a la que para subirse se necesita una escalera debido a lo alta que tiene la suspensión. Es demencial cómo gustan este tipo de coches por aquí. La conduce un hispano con pinta de Latin King, en España hubiese conducido un Renault 5 con ruedas de camión.


A unas pocas millas de Las Vegas sufrimos un buen susto. Empezamos a escuchar un ruido infernal que creemos viene del coche. Una especie de pitido muy agudo que parece salir de las ruedas. Decidimos parar, en medio del desierto con dos cojones. Apartamos el coche en un lateral de la carretera, en medio de la gravilla y salimos a inspeccionar.

No le pasa nada. Es por culpa de un cambio del asfalto y del viento bestial que se acaba de levantar. Qué locura. Estamos ahí, en medio del desierto, con los matojos rodando en medio de la carretera, con los cactus, los trailers pasando y sin nada que recuerde a vida en las inmediaciones. Mola un cojón.

Llegamos a Las Vegas alucinados por lo que aparece ante nuestros ojos. Edificios que imitan a la gran manzana de Nueva York pero a los que rodea una montaña rusa. Construcciones de tamaño descomunal, carteles de los magos, humoristas y showmans que actúan en los diferentes casinos, anuncios porno a gran escala, hoteles… ya hemos llegado. Sólo falta encontrar el Hooters.


Sabíamos que nuestro Hotel era un poco peculiar, Rafa se encargó de encontrarlo y seleccionarlo personalmente. Algunos pensarán que por el precio pero me temo que los motivos fueron otros. 

Hooters Casino Hotel es algo parecido al paraíso de los salidos. El personal sólo está formado por jovencitas de muy buen ver y generosos pechos ataviadas con muy poca ropa. Todas iguales, camiseta blanca sin mangas hiper ajustada y unos shorts naranjas muy ajustados también. En Europa podría ser ofensivo pero aquí se ha convertido en una especie de icono familiar. Muchas chicas quieren ser chicas Hooters y muchos chicos quieren que lo sean. No somos nadie para juzgar, sólo queremos party "allnightlong".

Aparcamos y entramos al Hotel. Rafa ve el paraíso. Antes de seguir os explico cómo son aquí los casinos y el ambiente general.


Resulta que un casino aquí tiene una magnitud bestial respecto a lo normal. Cualquier edificio de aquí tiene un tamaño más grande que cualquier edificio de Barcelona y todos son casinos.

Cada casino tiene hotel incorporado, varias plantas dedicadas a las tragaperras, al Poker, al Black Jack, ruleta, dados y todo lo que se os pueda ocurrir. Además tienen restaurantes, clubs nocturnos, salas de fiesta, conciertos, platós de televisión y algunos hasta un centro comercial más grande que Gran Vía 2 o Diagonal Mar. Todo esto cada casino, que quede claro.

Además incorporan elementos propios. El Caesar's Palace recrea la Grecia Antigua mediante estatuas renacentistas, columnas dóricas, recreaciones de templos y hasta un caballo de Troya de tamaño descomunal. El Bellagio, por su parte, es lujo puro. No recrea nada, se limita a ser lo más de lo más en cuanto a detalles, lujo, mujeres, juego… el Bellagio es lo más de Las Vegas en cuanto a glamour se refiere. Hay que verlo para creerlo.


Pantallas gigantes por la calle, anuncios con mujeres desnudas, gente que reparte entradas para espectáculos eróticos en cada esquina, todo el mundo bebido y bebiendo por la calle a las 7 de la tarde, chicas vestidas para matar y tíos en plan indigente, casinos grandes y pequeños en cada esquina, una torre Eiffel, una pirámide, una Estatua de la Libertad, los leones de la Metro, fuentes que lanzan chorros de más de 10 metros de altura, una recreación de la Gran Manzana con una montaña rusa a su alrededor…. espectáculo puro y duro.

 

Después de recorrerlo todo de pe a pa volvemos al hotel y Rafa se dispone a asaltar la banca. Cenamos primero en el Hooters Restaurant y, como no, nos sirven unas chicas con muy poca ropa y generosos senos. Es increíble ver que aquí cenan familias con niños y que en cambio, en Europa, esto habría producido denuncias y denuncias de un montón de asociaciones feministas.

Estas chicas están "entrenadas" para exhibirse mientras ponen un plato de alitas de pollo rebozadas, buenísimas por cierto, las alitas digo. Diligentes, sonrientes, marcando tetamen y pandero y nosotros enfrascados en una discusión sobre si nuestra camarera particular es morena natural o rubia teñida de morena. Si es que hay que ser Looser.


Después de cenar dirigimos nuestros pasos al Dixie's, un garito dentro del mismo Hotel en el que ponen música y la gente se desfasa.

Una especie de coyote bar, donde una camarera con pantalones de cuero ajustados se sube encima de la barra y mientras l@s entretenid@s clientes colocan sus cabezas entre las torneadas piernas de la chica, ella les va rellenando el gaznate con una mezcla de varios licores con la intención de que, al acabar, un preciado billete de dollar acaricie ese liguero ya repleto de billetes que se contonea al ritmo de la música del local.

La noche se va desquiciando y poco a poco la gente empieza a comportarse raro. Todos los hombres del local van bastante desfasados y nosotros, europeos con mucha clase, decidimos sentarnos y observar. Al cabo de pocos minutos un grupito de chicas empieza a lanzarnos miraditas. Son del este, dice Rafa.

¿Del este? ¿Del este de Europa o del este de América? ¿Rafa, tu estás seguro de que son del este? ¿Rumanas? 

Of course man. Simplemente lo se, son del este.

Del grupito de chicas todas se van a bailar menos una que se queda en la mesa. Al poco los buitres se le tiran encima y empiezan a desfilar uno tras otro todos los hombres del local. Aún así es muy amable y no les manda a la mierda a las primeras de cambio, lo hace a las segundas pero con muy buenas maneras. Para nosotros es un espectáculo ver el ritual de cortejo de todo engendro de todos los rincones del planeta.

Lo prueban gringos, latins, un negro y un tío de raíz indefinida y con bigote. Mientras le dan palique la chica se gira, nos mira una y otra vez y nos sonríe con cara de "venid a salvadme porfavor". 

Evidentemente somos loosers y no fuimos, vino ella. Se llamaba, atención, Gipsy y sí, resultó ser del este… del este de Mexico. Un minipunto para el radar de Rafa. Pudimos hablar castellano con ella durante un rato y conocer un poco más la cultura de este santo país. Muy maja, con mucho palique, muchas miraditas, si… pero eran las tres de la noche y nosotros, auténticos warriors teníamos otros fines en mente.


Nos despedimos educadamente y Rafa se fue a una mesa de poker en la que después de ir ganando 190 dólares fue destrozado por la suerte y un crupier desalmado.

Yo subí a la habitación a ducharme y a sobar. LLevábamos demasiadas horas dándole caña al cuerpo y nuestra aventura en Las Vegas estaba a punto de acabarse. 

A las 5 de la madrugada llega Rafa a la habitación cabreado con el mundo por haber perdido la partida. Tiene premio de compensación, ha conseguido un buen puñado de fichas del Casino Hooters que, a diferencia de los logotipos que lucen las del Bellagio o las del Flamingo, aquí tienen dibujadas a tías en pelotas.

Las Vegas is out. Fuck Yeah.

sábado, 6 de marzo de 2010

Looser Trip - Día 4 - El cielo de las gambas


7 de la mañana. Dios, pero que horarios son estos!?
Como es posible que nos acostemos a las 11 de la noche y nos despertemos a las 7 de la mañana? Si nosotros somos seres nocturnos! :S Debe ser que nos estamos transformando en verdaderos americanos! Mañana mismo nos compramos una bandera sin falta para jurarla como dios manda.

Para intentar despejarnos un poco ponemos la tele. Miles de canales hispanos y religiosos invaden nuestras retinas. Por mucho que subimos de canal no sale ninguno normal. Algún programa chino también sale. Debe de ser alguna televisión local de Chinatown. Resignados, dejamos una especie de Mtv católica, en la que descubrimos un super hit que nos parece la caña. Prestad atención a la letra. : D

A la vez que bailamos ritmos cristianos, notamos que dormir en esta habitación ha sido una bendición. Estas camas nos han renovado. Mi pierna ya casi ni me duele. Awesome!!

Mientras Dani finaliza el relato de nuestras aventuras de ayer, yo me dedico a preparar la ruta por la que iremos hoy, y que cosas visitaremos.
Una vez ya estamos listos para irnos directos, pillamos nuestro flamante PT Cruiser y nos vamos hacia Hollywood Blvd!

Ya me he mimetizado con el estilo de conducción americano. Ha sido relativamente sencillo, pero a veces cuesta acostumbrarse. Al llevar un automático, en el que solo aceleras y frenas, mi mano derecha se va a la palanca de cambios cada vez que freno, y mi pie izquierdo se mueve para apretar el embrague, pero es en ese momento cuando la realidad me golpea y me dice: "Man That's not the american way. FAIL!"
Además es curioso porque aquí hay normas de conducción diferentes. Por ejemplo, en un cruce con el semáforo en rojo, si quieres girar a la derecha, puedes! Aunque esté en rojo, tu haces un "ceda" y listos. Anda que no costó pillar eso!

Y cuando quieres girar a la izquierda, suele haber un carril preparado para que te pares en él y esperes a que no venga nadie de cara para cruzar como puedas.


Que es eso de los semáforos con una flechita? Eso es para los moñas europeos, los Americanos de verdad tenémos el doble de cojones.

- Dani, has visto ese cartel?
- OSTIAS. Miguel Bosé!

Aquí en Los Ángeles hay muchísimos carteles de publicidad, y ese concretamente era publicidad de una emisora de radio hispana, donde había una foto de Miguel Bosé de hace 15 años!! OMG.
Es curioso encontrarte cosas de España por estos lares.
Ayer mismo durante el viaje, después de oír 7 veces los cd's que tan amablemente Elena nos preparó (thank you!) nos dió por oir que daban en la radio, y tras estar un rato jugando con el dial, nos aparece "la puerta de Alcalá" de Victor Manuel y Ana Belén!! xD
Ahí estábamos nosotros, en una carretera infinitamente recta, rodeados de campos de los teletubbies cantando a grito pelado "ahí está, ahí está viendo pasar el tiempo.."!! : D

Otra cosa que nos sorprendió de los carteles es la cantidad que hay sobre el Sida.
No paran de informarte y prevenirte sobre la enfermedad. "Que si quieres puedes hacerte tests de manera gratuita." "Que cada 9 minutos un nuevo americano se infecta.." Que buen rollito. :S


De momento aparcar esta siendo súper fácil. Como todo esto es tan grande y hay tanto espacio, siempre hay algún hueco libre, así que sin problemas nos metemos por una callecilla de casas unifamiliares y nos quedamos a 1 calle del inicio del Hollywood Bulevard! Let's rock man!

Una vez llegamos a la primera estrella la realidad nos golpea directamente en la cara, y el cine se encarga de reírse de nosotros. Esperabais algo de glamour? Creíais que en el paseo de las estrellas las rubias paseaban sus perritos bajo el sol y rodeadas de heladerías y tiendas chic? Nada más allá de la realidad.

Esto es una calle igual de decrépita (sino más) que las demás. Una calle sucia, lleno de tiendas de productos fetish, con maniquíes vestidos con ropa de putón y cuero. Vuelven los homeless, y las tiendas cutrones o abandonadas.
Todo muy cutre, pero eso si, con estrellas de famosos en la acera. Nos venden glamour, y la realidad es una basura.
Menuda decepción. Además, no conocemos ni un 10% de los nombres que hay en esas estrellas!

Una alegría llega cuando descubrimos la estrella del tito Humphrey. Nuestro Looser honorífico.


Paseando por la enorme avenida, nos cruzamos con Frodo. Iba con gorro y gafas de sol, pero vaya, me corto un dedo a que era él!
Y señores.. Dos iglesias de la cienciología! Pero por dios! Que es esto? Y enormes eh. Muy basto.
No consigo entender como es posible que en cada lugar nos encontremos con seguidores de esa secta!?
Aun así, casi entro a por un libro, pero eran pagando. Que les den. Un fiel menos :D

Cuando la calle empieza a mejorar de aspecto, PAM, nos la encontramos cortada. Todo lleno de seguridad, cámaras de televisión, camiones y cables. Están preparando toda la parafernalia ya que en 2 días serán los Oscars.


Aprovechamos y entramos en el Kodak Theatre donde se celebrará el evento. La alfombra roja estaba tapada por varias capas de cartones y plástico. Lástima! jeje.
Esto parece ser un centro comercial!! Es como si cerraran un día Diagonal Mar y decidirán entregar ahí Los Goya.

Salimos a una zona abierta y vemos a lo lejos el cartel de Hollywood. Nos sentimos como en casa. :)

 

Salimos a la calle y..
- Uou! Esto es lo que parece!?
- Si no?
- LoL!

Una manifestación católica! Para que todos nos arrepintamos de nuestros pecados, que seamos buenos, que abracemos a Jesús! Dios santo. Es que aquí no hay nadie cuerdo!? :S


Tras toda la mañana nuestro y sin haber cenado tras el fiasco de ayer, nos acercamos a una pizzería bastante cutrona que nos había recomendado un vendedor de viajes turísticos que resultó ser de Barcelona y que era un freak de los videojuegos. xD

Con el estomago lleno y sientiéndonos dos personas nuevas, nos vamos a Rodeo Drive. El lugar con más glamour del mundo. Un triangulo de calles situado en Beverly Hills, donde todas las tiendas son HIPER pijas. No veas con los cochazos que habían allí.



Pudimos aparcar allí mismo, pagando 1$ por una hora. Al igual en Barcelona tienen esos precios. Y este parking (zona azul) es de los caros!!

Dani tenía el antojo de tomarse un frapuchino en el mismo lugar donde tantas veces lo habrán hecho Britney Spears o Paris Hilton. Y aunque lo buscamos durante mas de media hora, al final no lo encontramos. Y eso que el mundo se empeñaba en hacernos ver pasar a gente con vasos de ahí! Mira que somos Loosers coño. xD

No tardará mucho en hacerse de noche, así que decidimos ir a la zona de los estudios de Hollywood. Para poder llegar allí hemos de cruzar la montaña, y aunque podríamos ir por la autopista, preferimos cruzar la montaña a pelo e ir por la mítica Mulholland Drive. ;)


Resulta ser que esa montaña es donde se encuentra Bel Air. No veas que pedazo de casas. No vimos al tito Phil. :(

Una vez salimos de Mulholland, me encabezono en ir al City Walk en la Universal City. Un lugar en medio de Los Angeles donde todo es propiedad de la Universal. Algo así como un port aventura en medio de la ciudad. Con dos cojones y sin tener más idea de lo que nos íbamos a encontrar que la linea "where the fun is" que rezaba la guía turística, nos metemos y pagamos 10$ de parking. Ou yeah!

Al final el sitio resulta ser la polla! Coches incrustados en las paredes, guitarras gigantes, un king kong colgando de los carteles, todo llenos de luces y pantallas gigantes.. una locura extrema. Todo a lo bestia. Miles de locales rarísimos, como una tienda solo de imanes o solo de calcetines! Bizaarrísimo todo. Incluso un restaurante Bubba Gump!!

 

Tras ver todo el recinto nos tomamos algo en un lugar llamado Yogurtlandia sentados al lado de un hombre raro que le intenta vender el diseño de un parque tematico sobre Disney, king kong y nueva york a alguien que parece un homless! Yogurt a peso! Que locura. xD




Habíamos hecho una reserva para cenar en el Bubba Gump y se nos tiró el tiempo encima, así que los 10 minutos de acabarnos el Yogurt ya estábamos sentados en la mesa del restaurante. : D
Un lugar con un barco fuera y en el que todo estaba ambientado sobre la peli de Forest Gump. BRUTALISIMO!

Resullta ser un restaurante familiar, muy molón, y nos toca un camarero muy cañero. Mola.
Ahí me vuelvo a replantear, porque todos los americanos tienen la voz tan grave? Todos los tios hablan como si fueran muy machos. Choca!

Dani se pide una bebida azul que viene con baso luminoso. Jajaja. Yo me pido una cerveza por primera vez en USA. Tras pedirme mi carnet para asegurarse de que tengo más de 21 años le pregunto por los limites de alcoholemia y me dice que mas o menos unas 3 birras. Al igual! xD


Resulta que nos podemos llevar los vasos de recuerdo. Ole! Pedazo vasos. :D
Nos hacen trivial a los asistentes en medio de la comida con preguntas sobre la peli. El camarero se emociona y tira una jarra al suelo sin querer. Oooooohhhh.. Se acabó el trivial.

Yo me pido una cosa llamada "el cielo de las gambas". Brutal. Pero más tarde me arrepentiré al descubrir que debería haberme pedido el plato estrella, la hamburguesa de gambas. :)

En la mesa teníamos 2 matriculas sujetadas por unas arandelas. En una ponía "Run Forrest Run", y en la otra  "Stop Forrest Stop". Si queríamos algo no teníamos que llamar al camarero, tan solo colocar la matrícula de Stop y vendrían a preguntarnos.

Hay que decir que el servicio en estados unidos es ACOJONANTE. El trato de los camareros y empleados en cualquier lado sorprende por su amabilidad y disposición a todo lo que desees.
Cada 10 minutos viene alguien a preguntarte si todo esta bien o si queremos algo. Estemos en el lugar que estemos. Nada que ver con España. Esto de que se "ganen" la propina es algo que se debería exportar.

Mas contentos que una castañuelas volvemos para casa. Pero justo antes de pillar la autopista.. Uo! Nos hacen un control policial!!
Paran a los coches de 10 en 10. Al menos hay 30 policias. A lo grande! Brutal.
No me piden nada mas que mi carnet de conducir, ni el internacional, ni sopla aquí, ni nada. Deben habernos visto con cara de pardillo porque el poli se ríe y nos deja seguir. xD


Estamos reventados, tras todo el día. Ya me siento un verdadero americano, tras saber  conducir un coche automático, girar las calles en rojo, y haber sido parado por un agente con gorrito canadiense. : D

Nos acostamos sabiendo que mañana nos espera el gran día! Road to Las Vegas!!
Hell Yeah!!

viernes, 5 de marzo de 2010

Looser Trip - Día 3 - Road Trip


Un campo repleto de girasoles, una hamburguesería americana, el tío Sam mirándome a los ojos e incitándome a que me alistase para defender a la patria, un grupo de vagabundos tullidos saltando a la comba, una bandera gigante ondeando al viento, el sueño americano…. y la voz de Rafa de fondo despertándome del único sueño que se podía tener en el hotel más infecto en el que jamás haya caído. 

Día 3, son las siete de la mañana, Rafa lleva dos horas despierto, hoy toca recorrer 600 km hasta llegar a Los Angeles, alquilar un coche y comprobar si adentrarnos un poquito en la América profunda puede con nosotros. 

Hoy el post lo escribo yo, Rafa está todavía convaleciente de la mala noche que le ha dado la pierna. Una pierna que, de seguir así, deberíamos cambiar por otra nada más llegar a las Vegas.

Nuestro plan inicial consistía en salir del hotel a las 7:30 pero como todos los planes iniciales no se ha podido cumplir. Quizá por que tardé en despertarme, quizá por que Rafa necesitó media hora para meter su pierna hinchada en el pantalón, quizá por que no teníamos huevos a salir de noche en una calle tan chunga con la nuestra.

A las 8 ya era de día y Los Tullidos, nosotros, ya estaban de camino a alquilar el coche. 

La tienda de alquiler de coches está a dos calles, tío. Esas fueron las palabras de Rafa al salir por la puerta. 12 calles y 4 colinas después seguía repitiendo la misma cantinela… pero ya no colaba. Las pintas debían de ser antológicas, dos tíos cojeando, sin afeitar y tirando de unas maletas bastante echas polvo. 

Sí, nuestra integración con la ciudad ya era completa, parecíamos dos Homeless.

Encontramos la tienda de alquiler de coches y rellenamos los papeles, elegimos conducir un PT Cruiser, por aquello de ir con el coche más americano y bizarro posible, y nos ponemos en marcha.


Con las llaves en la mano bajamos al sótano y nos guían amablemente hasta él. Qué chulo, pensamos, cómo mola y encima es automático!. Rafa conducirá primero, tiene 10 años de carnet y se supone que mucha habilidad con los vehículos así que será el encargado de abrir fuego. Esto está chupao!

Pasan 15 minutos y el coche no se ha movido. No sabemos arrancarlo. Malditos americanos, ¿por qué no tienen marchas? ¿Por qué no tienen embrague? ¿Por qué no se mueve esta maldita palanca que debería moverse?

Acude en nuestra ayuda un simpático operario hindú que nos explica, brevemente y con un inglés peor que el nuestro, cómo se conduce un monstruo así. Lo entendemos, conseguimos movernos y salimos del parking.


Los primeros minutos en el tránsito de San Francisco son divertidos. Estos americanos conducen como si estuvieran en Vietnam. A duras penas Rafa se hace con el control del coche y endereza nuestro camino. Ya estamos en marcha. Los Ángeles allá vamos.

Las carreteras son enormes, de hasta siete carriles y la calidad del asfalto varía mucho de un tramo a otro. Eso sí, los coches aquí son enormes, estos Americanos lo hacen todo a lo grande y claro, conducen unos auténticos monstruos que en Europa no podrían ni girar una calle.

Pensad que un Audi A4 Familiar, que en Europa es grandecito, aquí se ve como un coche muy pequeño y hasta cutre. Los coches que les gustan a esta gente son casi como tanques, cosas enormes y con ruedas vastísimas. Es lo que tiene tener espacio casi infinito y casas con jardín, claro.

Cruzamos un puente enorme, el Bay Bridge, y llegamos a la península en sí. Nuestra ruta nos lleva por la Autopista 508 que, en determinado punto, se convertirá en la Interestatal 5 que nos conducirá de pleno a Los Angeles, ciudad de celebridades y chicas de moral distraída. O eso dicen, claro.

Conducir aquí es fácil, los coches automáticos se conducen solos y las carreteras son tan grandes y espaciosas que no dan sensación de velocidad. Si a eso le sumamos que la carretera son 600 kilómetros de recta infinita, sin curva alguna, se convierte en un viaje que puede hacer un niño de 16 años. 16 años, la edad a la que les dan el carnet de conducir aquí, ahora lo entendemos todo.

El paisaje es increíble y el sol acompaña. Montañas verdes que parecen ser el fondo de pantalla del Windows XP, pequeñas granjas, ovejas, vacas, campos infinitos, prados bestiales y una carretera recta salpicada por algunas áreas de servicio y de descanso.



Decidimos parar en una para que la pierna de Rafa coja aire, de paso compraremos bebida y comida. Las áreas de descanso aquí son muy curiosas. Consisten en una especie de merendero, todo muy bonito con campos verdes y americanos paseando perritos que llevan en los coches, y un conjunto de máquinas expendedoras de bebidas y comida.

Nos sorprende el tamaño que tienen aquí los Twister, los Crunch y los Kit-Kat. Son auténticas exageraciones, casi como reglas de 30 centímetros y a un precio de menos de un euro. Desde luego a los Europeos, en Europa, nos debe gustar que nos timen o yo no me lo explico.


Recompuestos y con una botella de agua volvemos al viaje. Serán 4 horas más de conducción en línea recta hasta que decidamos parar a comer.

Lo hacemos en Fresno, ciudad que a todos nos sonará, después de haber pasado por sitios de nombre extrañísimo (cómo les gusta mezclar nombres con palabras en inglés y castellano) como Las Positas Road, o El Torito Collegue Avenue.

Un cruce de carreteras, la interestatal 5 con otra, en el que han levantado de la nada un pequeño pueblo. 4 gasolineras haciéndose la competencia, 6 o 7 sitios para comer y una calle central que se pierde a lo lejos alrededor de la cual se levantan pequeñas casitas y tiendas para los trabajadores. Un pueblecito dedicado a los viajeros.


Comemos en Denny's, el típico sitio de carretera en el que hincar el diente al estilo americano. De primero, para picar, unas patatas fritas con cheedar y bacon, buenísimas. De segundo, Rafa ataca a un Spicy Cowboy de ternera y yo a unas pechugas de polo BBQ. Todo muy americano acompañado de judías verdes, maíz y puré de patatas.

La bebida, siempre que pidas agua o té es gratis así que nos lanzamos a por ellas. La comida estaba buenísima pero lo mejor estaba por llegar, el postre.

Empiezo con el mío que es el más sencillo. Una bola de helado de vainilla situada sobre un pastel de manzana, recubierto todo con dulce de leche. Una auténtica delicia por la que Laura mataría. Tranquila que volveremos y lo podrás hacer.

Rafa, y aquí viene lo bueno, se atreve con el rey del cotarro. Se pide un Smooth Ice Cream Coke. Lo que viene a ser, atención, un vaso enorme hasta arriba de cocacola en el que echan dos bolas de helado, una de vainilla y otra de nata. Muy, muy duro. Cocacola y helados en el mismo pack. Todo muy madre in usa y haciendo buena la típica frase de, si te gusta la pizza de 3 quesos y también te gusta la nata, si las juntas estarán doblemente buenas.

 

Salimos de Danny's, encantados con el exquisito trato y la alta cocina que nos acabábamos de meter entre pecho y espalda, no sin antes haber hecho migas con la manager del local, una señora de sesenta años, y una camarera hispana que servía de traductora. Sólo vernos nos preguntan que de dónde somos. Manda huevos, ¿tanta pinta de guiris tenemos?. 

Quizá se pensaban que éramos de San Francisco, claro, por el aspecto de vagabundo. Debe de ser eso.

Nos dirigimos al coche y a los pocos metros observamos una estampa que marcará el día. Un camión enorme arrastrando a un tanque del ejercito. Así, a palo seco y sin anestesia, como si fuese lo más normal del mundo. Por supuesto que tanto el camión como el tanque llevaban un montón de banderitas americanas ondeando al viento.

Después del susto ponemos gasolina, una experiencia bastante interesante al no tener ni idea de qué tipo de combustible usa nuestro pequeño PT Cruiser y seguimos adelante.

La vegetación va cambiando poco a poco y del verde intenso pasamos al marrón desértico. El sol, palmeras, el ambiente, las señales de la carretera… estamos en Los Angeles.

Por supuesto nos perdemos al entrar y no sabemos dónde estamos. Aparecemos en un barrio que parece sacado del GTA IV y que da bastante canguelo. En cualquier momento podrían aparecer miembros de unas bandas rivales y empezar a pegarse tiros. Por suerte no pasa y gracias a la guía que Laura me regaló conseguimos encontrarnos y dirigir nuestros pasos hasta la calle Broadway en donde está el Royal Pagoda Hotel.



Cruzamos Hill Street, sí la misma calle de Canción Triste de Hill Street, pasamos por delante de la comisaría de policía de la serie de TV y a un par de manzanas divisamos nuestro hotel.

Es de noche y de la nada emerge una pagoda china iluminada por neones rojos. Es un puticlub?, nos preguntamos… No, es nuestro hotel. Aparcamos el coche, tienen parking gratuito para los huéspedes, nos dan la habitación y dejamos las maletas.


Esta vez sí hemos triunfado. Dos camas dobles, lavabo, ducha, armarios, nevera, televisión, todo muy limpio y decorado al estilo japonés. Viviremos durante dos días en pleno Chinatown, ya os contaremos qué tal nos va.


En un último amago de valentía y a las 9 y media de la noche, hora en la que todo españolito se plantea si cenar o si todavía es demasiado pronto, decidimos ir a comprar algo de manduca y a ver por dónde se mueve la fiesta.

Nuestra zona de Los Angeles, Chinatown y el Downtown con el Staples Center al frente están desiertas. No hay gente, no hay movimiento, no hay sitios donde cenar, no hay nada… volvemos al hotel con el estomago vacío. Ya comeremos mañana, total, aún hay que digerir el vaso de cocacola con las dos bolas de helado.

Looser Trip - Día 2 - Los tullidos.

He tardado un rato en decidir que título le ponía a la entrada ya que podrían haber valido perfectamente opciones como, la sorpresa, la pateada, el contraste, o la realidad, pero al final me he decantado por los tullidos. Es la que mejor resume la sensación que nos queda del día de hoy.

Empieza el día muy pronto.
3 de la madrugada, duermo plazidamente en la litera de arriba descansando de la intensa jornada de ayer cuando un ruido me despierta. Un sonido similar al de un impacto seco contra metal me pone alerta.

- Dani?
- Sí tio. ¬_¬ Me he levantado de golpe. Puta litera..
- Jajaja. Empezamos bien.
- Oye, solo son las 3 no? En Barcelona deben de ser las 12am.
- Fucking Jet Lag.

Intentamos dormirnos un rato más, pero el sindrome del avión transoceanico ha hecho mella en nosotros, y volvemos a dormirnos de 20 minutos en 20 minutos, mierda. Así hasta que a las 6 de la mañana no hemos aguantado más y nos hemos tenido que levantar.

4 horas de correos, posts, twitters, facebook, videoconferencias, la ruta diaria de webs, y la descarga de rigor de cada miércoles del capitulo de Lost.
Nos han dado las 10 de la mañana, y es buena hora para hacer nuestro "brunch".
(BRUNCH: Termino anglosajón referido a aquella comida que no es ni un desayuno (breakfast) ni es comida (lunch), la cual se podría considerar como un segundo desayuno más pesado)
La idea era desayunar las típicas tortitas con huevos revueltos y bacon, pero el ambiente sumamente deprimente que tenía cada uno de los "locales" a los que mirabamos nos hizo decantarnos por desayunar un muffin y un frapuchino en el primer Starbucks que encontramos. : (

Una cosa que ya vimos ayer pero que hoy hemos confirmado es que la gente de aquí es muy solitaria, no se si es debido a que llevan un ritmo de vida muy ajetreado, o que realmente van a su rollo, pero cada lugar de comida tiene más asientos individuales que mesas para 2 o más personas.
Además, hay muchisimos lugares que no hay ni mesas, tan solo 4 bancos en la barra y ya esta. "Compra tu comida o bebida y pírate". Es normal ver a gente comiendo su trozo de pizza o bebiéndose el café caminando con prisa por la calle.


Llama especialmente la atención que hay "homeless" por todas partes y en una cantidad asombrosa. Ayer no diferenciábamos a la gente rara de ellos, pero hoy ya hemos digievolucionado y somos capaces de notar las sutilies diferencias entre ellos. A destacar "raros" especialmente locos, una mujer que parecía realmente enfadada que estaba sola gritandole a una parada del autobús, y un tipo que nos cruzamos, cantando y gritando algo extremo con sus walkmans puestos. En serio, que mal rollo dan algunos. :S

Jaja. Explicando todo esto me acabo de sentir como el tío Matt de los Fragel Rock cuando enviaba sus postales y tenía siempre sus propias teorías para todo. xD

- Venga, que hacemos ahora, donde vamos a ir después de este reconfortante desayuno?
- Mmmmmm.. Metro, tranvía o a pata?
- A pata como los campeones. :) Ya tendremos tiempo la semana que viene de pillar un tranvía.

Y así decidimos que recorreríamos San Francisco a pie de un extremo a otro durante todo el día, disfrutando de esta ciudad en declive y con ganas de confirmar si toda entera iba a ser así de triste o no.


Salimos del civic center de Market Street, y decidimos dirigirnos hasta el Embarcadero. Toda una calle recta y ancha que nos llevaba directamente hasta la bahía.
Empezamos a caminar y poco a poco la ciudad iba cambiando, no solo porque el cielo empezaba a nublarse, sino porque los garitos cada vez eran menos chungos,  las tiendas más amplias y la gente vestía mejor.
Sorpresa! Un mercadillo en pleno centro! :o


En medio kilometro ya todo era diferente. Entramos en la zona comercial de Union Square donde todo eran tiendas "pijas". Algo parecido a Portal del Angel pero a lo grande y con coches. :P
Curiosamente continuábamos viendo "sin techos" incluso en esas zonas. Y esa tónica continuó durante todo el recorrido de la ciudad. San Francisco es sin duda la ciudad de los vagabundos.


Otra cosa que también nos llamó la atención es la cantidad de tullidos que vimos por el camino. Gente con muletas, con silla de ruedas eléctricas, con cojera, etc.. Intuimos que debe ser culpa del caro sistema sanitario que aquí tienen y que a muchos pobres no les permitirá pagarse su plena recuperación. :(

Antes de llegar al distrito financiero empezó a llover ligeramente, pero al rato empezó a apretar. Suerte del paraguas que me metí en la mochila. Hombre previsor vale por dos!! : )
Con la que estaba cayendo lo mejor era meterse en algun lado a comer y esperar a que se calmara un poco. Entramos en un lugar parecido a un Fresco con menus, pero que no parecía ningún tipo de franquicia.
Ensalada con porción (gigante. aquí todo es a lo grande) de pizza era la opción más razonable de todos los menús que allí había.

Ya descansados y comidos, salimos a fuera y la lluvia no había cesado. Resignados con que esta situación seguiría así todo el día, nos vamos al Embarcadero.
Embarcadero es como un puerto, pero que también hace las funciones de mercado. Es un lugar muy chulo. Tenía un aire al Maremagnum, pero todo con un toque antiguo y tradicional. Menos sofisticado.

Las vista de la bahía desde allí eran espléndidas. Incluso tuvimos a una gaviota como compañera de viaje durante un buen rato. :)


Desde allí veíamos uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, la Transamerica Tower. Que aunque nos pillaba un poco lejos era un buen lugar para seguir nuestra ruta.

En el camino hacia allí, entre unas jardineras ví algo que saltaba, pensé que era un saltamontes y me dirigí a verlo por simple curiosidad, pero cual fue mi sorpresa cuando resultó ser un colibrí! OSTIA PUTA! Pero que pequeño es este bicho! Y que caña ver como se queda estatico en el aire flotando con sus alas batiendo a la velocidad de la luz! xD
Me quedé alucinado. Y aunque lo intenté con ahínco, me fué imposible poder hacerle una foto porque no paraba de ir de aquí para allá. Holly Crap!
Sin duda para mí, lo mejor del día. Me hizo mucha ilusión. : )


Una vez llegamos a la imponente torre decidímos continuar hasta Chinatown. Y tras pasar un par de calles, que nos encontramos?....
UNA IGLESIA DE LA CIENCIOLOGÍA!! OMG!
Que locura! Estarán Tom Cruise o John Travolta por aquí? Jaja.
Yo quería entrar a por un panfleto a ver como era el sitio, pero las malas experiecias de Dani con las sectas frenaron mi ilusión de ser un futuro cienciólogo.  : P


En ese momento estábamos en el barrio italiano, donde las farolas tenian pintadas la bandera italiana, y a medida avanzamos todo se llenaba de carteles inteligibles y dibujos artesanales de dragones y tipos regordetes. Por fin llegábamos al barrio chino.

Allí todas las calles son o una subida o una bajada entretejidas con las catenarias de los tranvías. Este barrio es la viva imagen que todos tenemos de San Francisco. Mola!


Una vez allí teníamos claro nuestro siguiente objetivo. Una parte especialmente interesante de Lombard Street. Pero tenía una pega, y es que esta casi en la zona mas alta de la ciudad. Fuck!

- Oye Rafa, un momento. Estamos en el barrio chino no? Nuestro hotel para toda la semana de la GDC no se llamaba North Beach!?
- Ole!

De pura chiripa acabamos en la puerta del que será nuestro hotel la semana que viene! Ni que decir que esta zona es MILLONES de veces mejor que donde estamos ahora. Estoy deseando de pasar el resto de los días ahí! :)


Nos armamos de valor y valientes empezamos a subir cuestas infernales. El dedo de Dani se resiente y mi pierna empieza a darme señales de que esto no acabará bien.
Por fín llegamos al lugar. Que vistas mas espectaculares, y que sitio tan freak con esas curvas imposibles que son la unica manera de bajar en coche con ese desnivel y no morir en el intento. xD


Por desgracia, subiendo las escaleras para los peatones noto como la rodilla me da un latigazo.
Mierda.
Bueno, espero no sea nada.

Continuamos el viaje, esta vez haciendo bajada y nos dirigimos a North Beach para apreciar mejor las visas de Alcatraz, y donde descubrimos (más tarde) que no solo en las tiendas de electronica del puerto de Barcelona saben timar a los guiris. Aquí también. :S


Fue curioso encontrarnos con un cartel gigante de publicidad de las gambas Bubba Gump!! 
Y no solo eso, sino que también nos encontramos con una máquina de Zoltar!! 
Parece ser que las 2 cosas existen en realidad! Todo buen cinéfilo sabrá de lo que hablo. : P

Mi pierna empieza a dolerme más. Es el momento de volver a casa.
Había dos opciones, en autobús o caminando.
Aun lo pienso y no se como le hice caso a Dani, pero decidímos volver caminando hasta el hotel.


Tranquilamente fué una hora y media de regreso mientras se nos hacía de noche por el camino.
Cada paso que daba, más me dolía la rodilla, y ya no podía ni doblarla. Me pasé el camino de vuelta andando como House, pero sin bastón y subiendo y bajando cuestas! Menuda manera de empeorar la situación!
Esto va a traer cola, como si lo viera..

Justo antes de llegar al hotel paramos en una franquicia de hamburgueserías llamadas "Carl's Jr". Muy buenas la verdad.
Ah sí! Una cosa que también nos ha chocado mucho. Es que casi todas las bebidas tienen un matiz diferente a las de aquí. Es como si tubieran un potenciador de sabor! También hay Pepsi "Zero", Nestea de Frambuesa, o una bebida llamada Dr. Peper que curiosamente sabe igual que la Cherry Coke..
No se, es todo muy extremado. Mola. : D


Una vez llegamos al hotel estabamos taaaaann rebentados que a las 22h ya nos fuimos a dormir.
Un día completito, muy cansado, pero con la sensación de que San Francisco no nos ha defraudado. Sino que más bien nos ha sorprendido por la suerte o la desgracia de haber caído en una zona muy mala.

En definitiva, estamos destrozados. Y ahora somos nosotros los tullidos. Habré de reformular mi teoría sobre ellos.. Mi pierna esta bien pero que bien jodida.

Podrán los tullidos Barcelonenses recuperarse de sus heridas?
Sanará el dedo de Dani?
Podrá caminar Rafa sin cojear durante estos futuros 15 días?
Podrán mañana llegar a tiempo y pillar el coche de alquiler como tenían previsto para dirigirse a Los Angeles, o se quedarán tirados en esta ciudad sin ley?

Todas estas respuestas y más, en el siguente post!